Una discusión muy interesante ha dominado las conversaciones entre estrategas de contenido, y es peculiar que haya surgido recientemente, durante un momento de evolución y cambio en la forma de hacer marketing digital. Se trata de un parteaguas en la forma de hacer esta disciplina, un tema que lo mismo tiene de polémico que de interesante: si las keywords o palabras clave siguen siendo la fórmula secreta para el SEO (clásica búsqueda de «¿Todavía sirven las keywords?»), o si los aclamados topics son la nueva estrategia a seguir.
Durante años, las herramientas de palabras clave han sido los mejores amigos de los creativos y planificadores de campañas; es curioso que, justo cuando creímos haberlas entendido, los motores de búsqueda cambian de nuevo hacia un nuevo estándar.

¿En qué momento pasó, cómo fue?
Hace no menos de unos 10 años, la manera en la que buscábamos cosas en Google era bastante diferente—y simple. En esa época era más común buscar cosas como “Zapaterías Mérida”, es decir, usábamos palabras clave fragmentadas para encontrar respuestas a nuestras preguntas e inquietudes comerciales. Hoy en día, buscamos cosas como “Zapaterías baratas cerca de mí”, pues ya se nos hace más cómodo hacerle preguntas complejas a los buscadores, y además, que nos entiendan: esperamos un resultado exacto y en tiempo real.
Esto tiene mucho que ver con una actualización al algoritmo de Google, llamado Hummingbird, que se desarrolló pensando en las aplicaciones que funcionan como asistentes personales, los cuales dependen del reconocimiento de voz e interacción con usuarios, como Siri, Google Home o Alexa.

El algoritmo que le da poder al sistema, en conjunto con el llamado Machine Learning (un estilo de “inteligencia artificial” llamado aprendizaje automático, que hace que las computadoras empiecen a establecer relaciones lógicas entre causa y efecto que derivan en un estilo de comprensión) han hecho que los motores de búsqueda sean lo suficientemente astutos para reconocer conectores en búsquedas de quienes quieren resultados específicos, haciendo así que todo lo indexado se divida en tópicos de información relevante y acumulada, que a su vez dependa del contexto de la búsqueda.
Además, de esta manera, las personas también logramos entender más a los motores de búsqueda. ¿Cuántas veces no te bastó con leer la meta descripción que arroja Google en una búsqueda para obtener tu respuesta completa? Así es, esta cambio también es gracias a ti… ¡si tan solo le hubieras hecho clic!
¿Y qué significa esto en realidad?
Google está ayudando a los buscadores a encontrar la información más precisa, incluso si no es exactamente lo que buscaron, tenga o no palabras clave su búsqueda. Y esto se puede lograr de formas poco ortodoxas, como acumulando una gran base de conocimiento en fuentes estrechas, que es exactamente lo que Google designó que sea el futuro que le depara a los creadores de contenido y los marketeros digitales.

Pero… ¿y mis palabras clave? 🙁
Tampoco te preocupes tanto. De entrada, estos cambios no son inmediatos y se van a ir desarrollando paulatinamente durante los siguientes meses. Además, estos tópicos que está introduciendo Google no son más que clústers de palabras clave, que quizás ya hasta trabajaste; solo que ahora no son unas cuantas, ni muy específicas: son miles de keywords relacionadas entre sí, ayudando a que el “spider” o “crawler” de Google entienda bien en qué se relaciona una con otra. (Sí, tú también podrás enseñarle a las máquinas… y contribuir a un potencial Skynet…)
En síntesis: No lo sufras, las keywords siguen siendo relevantes para tu estrategia de contenido; solo que ahora tendrás que pensar más como humano que como máquina inerte al hacer tus clústers. La singularidad, cada vez más cerca…
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¿Adaptarse o morir?
Todo cambia en la vida y los algoritmos no son la excepción. La manera en la que las personas buscan algo y como esperan encontrarlo es la clave aquí.
La regla de oro siempre será: adaptarse a estos cambios o verse forzado a quedarse atrás, nadie quiere llegar tarde al futuro.